En nuestra obsesiva intención de convertir a nuestras niñas en auténticos masais, dispuestas a recorrer media comunidad autónoma y parte del extranjero madrileño, decidimos comprar una botas montañeras en Decathlon (imprescindibles para estos menesteres) y lanzarnos a la aventura de intentar llegar hasta el final de la ruta de la Cascada del Purgatorio, en Rascafría.
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