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Si eres un auténtico fan de Agus y los monstruos, tienes suerte, porque acaban de sacar un juego de la misma colección. Se llama Room y se trata de un entretenido juego de cartas para niños, en el que tendrás que recoger la desastrosa habitación de Agus si quieres ganar.
Ya sabemos que recoger la habitación no es el punto fuerte de ningún niño. Creo que el 50% de mi tiempo como madre digo la misma retahíla: “¡Recoge tu habitación!”, y ya se ha convertido en un mantra interminable que se oye en mi casa como un ruido de fondo sin significado alguno.
El caso es que, esta vez, “recoge la habitación” tiene otro significado para mis hijas y, por suerte, parece que la frase no les rebota en los oídos ya que nada más decirla se lanzan como locas sobre este juego.
En qué consiste el juego de cartas Room
Por si todavía no los conocías, Agus y los monstruos es una colección de libros, una especie de novela gráfica pero con más texto, obra de Jaume Copons y Liliana Fortuny, que cuenta con muchos fans. Si quieres saber más sobre esta colección te lo cuento en este post.
En los libros Agus siempre tiene que resolver algunos problemillas que tienen unos monstruos que viven en su habitación, evitando las maldades del doctor Brot.
En el juego “Room”, tendrás que ayudar a Agus a recoger su habitación, eliminando los libros, ropa y comida, pero quedándote con los monstruos.
Se trata de un divertido juego de cartas muy sencillo, apto para niños a partir de 6 años, y de 2 a 6 jugadores.
Cómo se juega al Room
Se reparten 7 cartas entre los jugadores, o se extienden sobre la mesa, boca abajo, y cada uno escoge sus 7 cartas. El resto se retiran del juego porque no se van a usar.
Empieza el jugador al que le ha tocado Agus, o si no, se decide entre todos.
El objetivo del juego es conseguir el mayor número de monstruos posibles, librándose de la ropa sucia, los libros y la comida que Agus tiene esparcida por toda su habitación. Para ello, el que comienza debe elegir a qué palo va: ropa, libros o comida. Debe echar hasta 3 cartas en total con el mayor número de ropa, comida o libros que tenga. Los demás deben superarle en ese mismo palo, echando las cartas que tengan durante su turno. El que más cartas eche de ese palo se lleva las cartas.
A veces entre esas cartas se encuentran monstruos, así que, el que gana la partida se lleva también los monstruos. Se juega hasta que se acaban las 7 cartas de la mano. Después se cuentan las cartas y el que más monstruos tenga, gana la partida.
Pero no todo es tan fácil, porque existen cartas que pueden ayudar o entorpecer la partida.
– La carta de Lidia: Puede robar una carta con un monstruo de un turno anterior.
– La carta del Dr. Brot y la de Nat: Puedes cambiar tus tarjetas de puntos por otras de otros jugadores.
– La carta de los padres: Puedes robar la carta de otro jugador o de la caja y colocarla en tu mano.
En realidad, la mecánica del juego es muy fácil, y en seguida podréis estar jugando una y otra vez.
Es un juego bastante corto, apenas dura unos 5 minutos la partida, así que es perfecto para llevar al camping, la piscina.
Entretenido y fácil de jugar.
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